- Una olla para hervir la bebida de soja
- Una cuchara de madera
- Un yogurt de soja de unos 125gr.
- Un recipiente de plástico o cristal con su tapadera de una capacidad de al menos 1,50 L.
- Una manta de invierno.
Aquí os explico el procedimiento.
- Calentamos la bebida de soja en una olla, y apagamos el fuego justo antes de que hierva.
- Lo dejamos templar hasta que podamos introducir un dedo durante unos segundos sin quemarnos (entre los 40 y los 50 grados centígrados).
- Una vez tenemos la bebida de soja templada, la vertemos en el recipiente de plástico o cristal y la mezclamos bien con el yogur de soja. Es importante mover la mezcla con una cuchara de madera y no utilizar metales, ni en la cuchara ni en el recipiente donde vamos a hacer la fermentación, ya que los metales pueden alterar la fermentación y hacer que ésta no tenga lugar o no dé buenos resultados.
- Una vez hemos mezclado la bebida de soja con el yogur, ponemos un papel absorbente sobre la mezcla sin que toque el yogur y la cubrimos con la tapadera. (si vemos que este paso nos resulta complicado, lo podemos suprimir... pero con este método absorbemos un exceso de humedad en el yogur)
- Una vez tenemos el recipiente cerrado, procedemos a preparar la manta que utilizaremos para mantener una temperatura constante en la mezcla y se den las condiciones idóneas para que el yogur fermente correctamente.
- Colocamos la manta en una habitación donde no haya corrientes de aire y en una superficie alejada del suelo. Extendemos la manta y ponemos encima de la manta el recipiente con la mezcla del yogur y cubrimos bien con la manta el recipiente que quede bien cubierto y abrigado.
- Una vez cubierto lo dejamos reposar y fermentar durante al menos 7 horas (entre 7 y 9 horas sería tiempo suficiente para que fermentara bien y tenga una buena consistencia).
- Después del tiempo de fermentación, retiramos el recipiente de la manta y podemos consumir nuestro yogur casero de soja. Este yogur puede ser conservado en la nevera durante al menos 7 días si lo tenemos bien tapado y refrigerado.
- Y éstos son los pasos para tener un yogur casero con los beneficios de sus bacterias buenas (Lactobacillus bulgaricus y Streptococcus thermophilus) para nuestros intestinos.
Espero que os guste y os sea útil esta receta, y aunque al principio puede parecer complicado, cuando la hagáis varias veces y le cojáis el truco, os resultará sencillo y os haréis adictos a este yogur que sale bastante más barato que comprarlo en el supermercado. :)
Gracias y un saludo.
Verita vegetal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario